sábado, 11 de septiembre de 2010

PARAISOS DORMIDOS.


Y mira que me da, que las conciencias de los políticos pensantes, no están todo lo contentos que deberían estar.  Los seguidores y especialistas de estas cuestiones miran con recelo el porvenir.  Otros,  no saben, no contestan, no se quieren enterar.
El próximo domingo día 12, Turquía acude a las urnas en referendo, para contestar a la pregunta de si se unen o no a la Comunidad Europea.  Por supuesto que saldrá el si.  Se presentarán en principio como demócratas, es su obligación, para una vez abiertas las puertas, continuar dentro de casa con su régimen otomano.
Gadaffi, mientras tanto, desde el interior de su haima que ha instalado en Roma asegura, que el Islán volverá a dominar Europa lugar en que no nacen niños, mientras que en los paises árabes, parece ser que son grandes reproductores.
Hace años para ellos, siglos para el resto del mundo, los musulmanes ni de coña dominaron Europa. Es cierto que fueron conquistando naciones que tienen frontera con el Mediterráneo.  Lo que no hicieron, fue dejar ejércitos en los lugares conquistados porque entonces, se quedarían sin hombres para continuar.  Es decir, conquistaban, seguían la marcha y los que en principio habían escapado del pueblo, al poco regresaban a sus casas.  Los romanos eran diferentes.  Dejaban soldados para engrandecer el lugar con buenas  y duraderas obras.
En la Península sucedió otro tanto.  En el norte dejaron a un grupo de ellos, unas vez conquistadas las tierras, más como a la lluvia y al frío no estaban acostumbrados, fueron bajando hasta las estribaciones del Duero, con clima más templado.  A partir de ahí, se pudo iniciar desde el norte la llamada Reconquista.
Pero también hay que decir que esta gente nos enseñó en todos los ámbitos, contenido de todas la materias.  Toledo con su escuela de traductores fue famosa en el mundo.  Hicieron grandes y monumentales obras, una de ellas una mezquita en Córdoba, hoy bautizada catedral para darle sabor católico y en la que su obispo, cual Cid en sus correrías, quiere hacer frente a unos musulmanes que su intención de momento es la de orar. Sobre el Corán, hay cantidad de opiniones, una de ellas que lo escribió Mahoma guiada su mano por Alá.  De ser así, Alá, tendría una Biblia delante porque el contenido en si, es bastante parecido, luego viene la interpretación de la suras, por tanto, a mi pobre juício el rezo, si sólo es rezo, ¿por qué no pueden hacerlo?. Es como si no dejan entrar a orar a los nativos de  Algeciras.
¿Y a ti que te parece todo esto?. Y Yusuf, mirando hacia las montañas del Atlas, ahora en color carmín; echando el brazo sobre cuello de su burro dice que no se lo quiten, que es un animal viejo pero llevan toda la vida juntos.
Supongo que como sucede en todos los lugares, hay musulmanes bastante amables, algunos conocí y se que todo esto les importa un carajo, que le dejen su cuchitril y el pequeño cafetín que regenta, en donde sirve un te moruno excelente al que echa unas hojas de menta. El té muy caliente lo que obliga al gran grupo que lo está tomando a sorber haciendo un ruído que en principio echa para atrás pero, que luego, te obliga a unirte, hacer lo mismo y está bueno de ese modo, puede ser el mejor té que has tomado en tu vida.
El musulmán por si, cuando camina solo, no es valiente ni amigo de follones porque también tiene familia, pero una vez forma parte de un grupo, puede ser peligroso ya que hace todo por su dios  y cuando camina de la mano de tal ser, la cosa se pone seria, tiene que obedecer, aunque la razón le diga lo contrario.
En Argel, se nos avisó que camináramos por las calles de cinco en cinco. El canario Cubillo andaba por allí dando el coñazo y además, era el primer barco de guerra español que atracaba en sus puerto tras la guerra contra los franceses.  Nunca he escuchado consejos y menos imaginarios.  Me da que nos vendían una película cómica sobre las gentes que visitábamos.  Por ello, un compañero y yo caminos en principio por una cuesta de tierra amarilla.  Apenas cuatro eucaliptos y unos arbustos, luego iríamos al centro. Seguimos subiendo, pasamos ante un cuatel de ejército por cuyas murallas asomaban unas palmeras y el mismo paisaje vacío. Aburridos de caminar, nos metimos por un callejón estrecho y al poco nos dimos cuenta de que estábamos en medio de la Casbah, lugar prohibido para cualquier persona extranjera.  En algunas paredes quedaban chapas en francés que decían "Callejón del diablo", "Paso del terror" y otras lindezas parecidas. Seguimos bajando mudos y atentos.  De vez en cuando se abría un ventanuco y un rostro asomaba y seguía nuestros pasos.  Había que tener cuidado de no pisar tripas y demás de animales, tirados en medio de los callejones y es que cerca, había una especie de mercado. Al pasar a su altura, todas las cabezas pendientes de nosotros.  Le decía: -No mires, no hables; sigue-. De repente vimos el mar, poco más adelante, una parte de la carretera del puerto.  Para mi fue volver a la vida. Corrían los años 70.
¿Has pasado miedo?. -¡Horrible!, me contesta, busquemos una cafetería con water.
Hoy, por lo vista se puede pasear, pero es que antes, y que alguien me diga lo contrario, era el diablo ocupando una zona oscura, sin niños jugando y en donde podías adaptar la mente a las situaciones más incomprensibles.
Lo único que les envidio es el poder vestir la chilaba. Y la grifa en ocasiones.
En Ceuta y Melilla, desde hace mucho tiempo, viven varias comunidades en perfecta armonía, los malo será cuando los revoltosos, los prepotentes, los poderosos de Rabat, un lugar en que vayas por donde vayas y preguntes a quien pertenece eso o aquello, siempre contestarán que al rey, un rey que abraza al nuestro, mientras me da, que por su cabeza ronda una y mil veces, la manera de como ha de darle la estocada.
Siendo niño, hace muchos, muchos años, me acerqué al pensamiento árabe, ya que tuve la pachorra o la voluntad de leer casi de un tirón, tres tomos de "Las mil y una noches", lo hice porque como dije, era niño y a falta de Penhause ni el Playboy aquello tenía un cierto aliciente aunque, a decir verdad,  tanto cuento aburría, pero, cuando algo se comienza hay que seguir hasta el final hice lo que hoy no haría, leerlo.  Para quien lo quiera. Hay otros libros que he comenzado y jamás he podido seguir, uno de ellos, "La guerra del fin del mundo" de Vargas Llosa. Ya se que muchos dirán que es muy bueno.  A mi, sinceramente, no me entra, en más de cuatro ocasiones me he puesto a ello pero,  no he podido pasar de la página cincuenta y pico.
Lo que no me entra, es la cantidad de mezquitas que a toda velocidad se están construyendo, con mucha urgencia,hay demasiada prisa.  Mi siguiente pensamiento es el de, ¿permitirían plantar en sus terrenos catedrales o iglesias católicas?. Me queda la duda.
Es que siempre hemos sido unos quijotes, lo llevamos por sistema.
Las que me dan pena son las mujeres, abnegadas, sin voluntad, pendientes de su macho men, que jamás dejarán a un lado el burka, terrible prenda; la hiyab ni tan siquiera el chador. Que jamás serán libres. Si no significase lo que significa, la shayla en la cabeza de una musulmana guapa, que las hay, me parce algo muy, muy bello.  Es mi opinión.
Los hombres, los más simplones, no se apean del machismo por mucho que lo disimulen.
Lo malo es que en casa, también me lo llaman.
Es que todavía no me entienden.
Sólo una cosa más que me acaba de llegar: "Andalucía impulsará el árabe como segunda lengua extranjera en la ESO. El Plan Integral de la Inmigración cuenta con un presupuesto de 2.500 millones hasta el año 2013... continúa... Así lo ha dispuesto el Presidente de la Junta de Andalucía.  Lo publica "Málaga hoy" y del mismo modo, se puede leer en la Red.
Aquí, silencio.  Será que el paro ha menguado del todo...

BOFETADAS