Hoy ha regresado. El viejo marino la ve en lo alto del bauprés, agotada.
- ¿Dónde has estado?.
- Viajando por siete mares
- y... ¿Qué te han parecido?
- Hermosos
- ¿Por qué has vuelto?
- Porque éste mar huele a salobre, porque sus salseiros juegan con mis alas.
- ¿Sólo por eso?
- Porque también, me gustan las historias que me cuentas.
- El timonel, un recio marinero de Muros, pudo ver como una lágrima, caía en cubierta.